Que otros decidan

9 de abril de 2016

Mateo 27.15-44

Que otros decidan

«Respondiendo el gobernador, les dijo: —¿A cuál de los dos queréis que os suelte?  Y ellos dijeron:—A Barrabás.  Pilato les preguntó: —¿Qué, pues, haré de Jesús, llamado el Cristo?  Todos le dijeron: —¡Sea crucificado!».  (Mateo 27.21-22)

 En los lugares de trabajo, en las familias y en la iglesia ocurren momentos en los cuales tenemos que tomar decisiones en grupo.  En esa dinámica encontramos personas que se imponen, personas que se oponen a todo, personas que hacen silencio, personas que repiten lo que otros dicen y personas que no asumen postura y prefieren que otros decidan.

Vemos en el relato bíblico que el gobernador le preguntó al pueblo cuál de los presos debía soltar: Barrabás o Jesús.  La gente escogió la libertad de Barrabás.  El gobernador volvió a preguntar «¿qué mal ha hecho Jesús?».  La multitud exigió su crucifixión.

En ocasiones, optamos por hacer silencio y no asumir posturas ante las situaciones que nos toca vivir como individuos, familia y comunidad.  Dejamos que otros decidan y nos quedamos de brazos cruzados, teniendo el potencial de hacer grandes cosas.

A nuestro alrededor hay mucho ruido que nos distrae y nos lleva a pensar que debemos optar por los Barrabás de la vida, que a la larga nos llevan a caminos de destrucción.  El mundo nos nubla el entendimiento y nos propone crucificar a Jesús mediante nuestros actos y desobediencia a Su Palabra.

Jesús nos llama a que decidamos por Él.  Cuando optamos por Jesús y permitimos Su entrada a nuestro corazón, vemos que nuestras propias vidas son libertadas y somos libres de aquello que nos ata.

Oración: Dios bueno, gracias por la bendición de conocerte.  Nos postramos ante Ti para decirte que anhelamos decidir por Cristo en todo momento.  Perdona las veces que hemos optado por escoger a los Barrabás de la vida y lo que no te pertenece.  No queremos que otras personas decidan lo que Tú esperas de nosotros.  Queremos asumir nuestra responsabilidad como cristianos y seguirte siempre.  En el Nombre de Jesús.  Amén.