Altar Familiar- 14 de mayo

Revdo. Héctor S. Reyes Martínez, Ph.D. 

Pastor ICDC Cerro Gordo

Región 2

EL AMOR ES VITAL

Cántico: Con mis manos y mi vida

Con mis manos y mi vida te alabo Señor, te alabo Señor.

Con mis manos y mi vida te alabo bendito Señor.

Porque tu has sido precioso para mi, precioso para mi precioso para mi.

Porque tu has sido precioso para mi, te alabo bendito Señor.

Lectura  Salmo 113: 1-2

Aleluya, Alabad, siervos de Jehová, Alabad el nombre de Jehová. Sea el nombre del Señor bendito, desde ahora y para siempre.”

Oración de Acción de Gracias por la presencia del Señor en nuestras vidas

Cántico: Vivificame

Vivifícame, vivifícame, vivifícame.

Por favor Señor obra en mi interior, tómame aqui estoy.

//Confesando a flor de labios, y mi corazón en mano.

Santo Espíritu, hoy me rindo a ti oh quebrantame.//

Lectura bíblica:   Salmo 86: 1-4 

“ Inclina, oh Jehová, tu oído y escuhame, porque estoy afligido y menesteroso. Guarda mi alma, porque soy piadoso; salva tú, oh Dios mío, a tu siervo que en ti confía. Ten misericordia de mí, oh Jehová porque a ti clamo todo el día. Alegra el alma de tu siervo, porque a ti clamo todo el día.”

Oración de Interseción: 

Oremos por las personas que necesitan sentirse amadas en este tiempo , donde experimentan la soledad y el abandono.

Oremos por los que sufren distintos males, enfermedades, perdidas, carencias y pidamos que Dios supla en todas la áreas empezando por su inmeso amor manifestado por la iglesia y los demás.

Cántico: Grade amor

//Grande amor profundo amor, el que Dios tiene para mi.//

//No lo puedo entender pero él me ama. No lo comprendo pero él me cubrirá. Todo mi ser, se llena de él. Porque profundo e inmenso es su amor.//

Reflexión: El amor es vital

Lectura Bíblica: 1 Juan 4:7-11

Hablar del amor es un tema muy importante. A veces es muy común y la gente habla mucho de esto, pero me pregunto si entendemos realmente el significado de esa palabra de 4 letras, tan corta pero tan importante. El amor es un sentimiento, dicen algunos, otros que es una decisión.  Yo prefiero verlo como un regalo de Dios. Algo que Dios nos dio sin esperar nada a cambio. Es algo que vino como don y fruto del Espíritu. O sea, que es un regalo para usarse para edificar a otros, pero a  su vez es una muestra de que Dios esta en nuestras vidas.  

Desde la perspectiva psicológica se ha confirmado que las personas no pueden vivir sin sentirse amadas. Es decir, que es una necesidad emocional el amar y dejarse amar. Esto es que doy amor pero necesito recibir amor. La falta de este sentimiento crea una ausencia tremenda y un vacío que puede llevar a las personas a encontrarle sentido a la vida o no encontrarlo. Hay distintos tipos de amor, el amor romántico que es el de la pareja, el erótico, que es el pasional o sexual, el amor fileo, que es entre padres e hijo o amigos. Pero hay un tipo de amor que se instituye con Jesús que es el ágape. Este amor es el que viene de Dios que se entrega todo. El ágape es un amor que se entrega a sí mismo, que solo busca el bien del amado. En el ágape no hay nada malo ni egoísta. Este amor deriva solo de Dios y en él tiene su origen.  

Eso nos dice en primera de Juan 4: 7 al 11, donde se habla precisamente de este amor y nos da una enseñanza de lo que implica el amor de Dios o ágape en nosotros. De entrada este texto establece que debemos amarnos los unos a los otros. Pero esto lo debemos hacer porque el amor es de Dios. Dios desea que nos amemos y al hacer esto mostramos que hemos nacido de Dios y le conocemos. Lo contrario a esto, dice el verso 8, sería que el que no ama no ha nacido, ni conocido a Dios y la razón principal es porque Dios es amor. Si Dios es amor ¿Será posible que haya un Cristiano que no ame? La respuesta es no. Este texto nos indica lo importante y vital que es el amor en la vida del cristiano porque es lo que evidencia y dice concretamente que Dios esta en nuestra vida y que le pertenecemos. La esencia de Dios es el amor. Amamos porque Dios es por naturaleza amor y como él ha compartido su naturaleza con sus hijos e hijas, la expectativa es que nosotros hagamos lo mismo. En otras palabras los cristianos estamos llamados a amar por la simple razón de que el amor habita en nosotros, porque Dios esta en nuestras vidas al creer en Jesús. Amamos porque Dios es amor y habita en nuestras vidas. Es decir, si creímos en él ya esta ahí, solo hay que dejar que fluya. Ese amor puesto en nosotros por su Espíritu tiene una operación espontánea. (Cassesse, 102) Nos mueve a amar sin distinción y sin condiciones.

El amor de Dios se muestra a nuestras vidas en que Dios dio a su único hijo para que tuviesemos vida abundante y eterna. Pablo en Romanos 5:8 lo expresa así; Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.” El amor de Dios por la humanidad fue tan grande que estuvo dispuesto a dejar toda su Gloria para hacerse ser humano y sufrir la muerte vergonsoza de la cruz para que pudieramos ser limpios de pecado y tener oportunidad de una eternidad con él. 

En lo que consiste el amor dice el verso 10 es que; “no que hayamos amado a Dios sino en que él nos amo”  Es decir, a Dios no le importó que le amaramos, sencillamente el nos amo por ser su creación y él querer salvarnos. La gente hoy en día ama si el otro le ama. Sino le ama no le importa, pero en la vida cristiana no es una opción, como Dios nos amó así debemos nosotros amarle a él y al prójimo.  El amor cristiano no depende de lo que me den o haga, de lo que me ofrezcan u otorguen. El amor cristiano es uno que se da solamente porque Dios esta en nuestras vidas, nos ha dado de su amor y eso nos mueve a compartirlo. Cristo vino en propiciación de nuestros pecados. Que esto es, que Cristo se convirtió en el apaciguador, con su muerte sacrificial, de la ira de Dios por razón del pecado de los seres humanos. Jesús tomo el pecado del mundo y lo llevó a la cruz, tomando nuestro lugar para perdonarnos y limpiarnos de toda maldad. Esto solo se hizo por amor. 

Por eso el verso 11 nos da un mandato “si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros.” Lo que se afirma en estos versos es importante, porque si decimos que hemos recibido a Cristo en nuestro corazón, hemos nacido y conocemos a Dios, el Espíritu Santo esta en nuestra vida y el amor de Dios también. Por lo tanto, debemos amar como Cristo, amándonos los unos a los otros. Ese amor produce un cambio en nuestra manera de vivir que no es otra que haciendo actos de amor. El amor es vital porque al tenerlo nos lleva a darlo a otros y la sociedad se transforma. Juan recomienda el amor como una prueba de la vida Cristiana. Esto porque pone de manifiesto la fuente del amor en la naturaleza de Dios, tal cual se revela en la cruz. Los cristianos demuestran que son hijos de Dios a través de actitudes y acciones de sacrificio como las del mismo Jesús. 

Cuando esto ocurre se da un cambio en la sociedad de como veo el amor. Ya el amor no es solo sexo, pasión, desear a otra persona o simplemente amarlo si me hace bien. Ahora este amor de Dios en nosotros nos lleva a amar a las personas por lo que son, indistintamente de lo que nos hagan o no. 

Ante esta pandemia la gente necesita de ese amor que muestre interés por los demás, sacrificio de servicio al que sufre y apoyo y acompañamiento al que tiene necesidad. El amor es vital y más ahora cuando hay un gobierno que no muestra su amor porque solo le preocupan sus intereses y su propio bienestar. Pero lo peor es que pasa lo mismo en instituciones de ayuda y aún Iglesias que es mas importante su nombre, su prestigio y a veces solo sus miembros. El verdadero amor de Dios es sin preferencias ni requisitos.  El de la iglesia y las instituciones que sirve, también debe ser así. Este debe buscar el provecho y bienestar de todos y todas los que sufren y les ayuda a levantarse de su caos, dolor y desesperanza. El amor es vital porque se traduce en esperanza de vida, provisión y compasión. ¿Estamos mostrando ese amor?    

Oración de cierre:

Oremos porque el amor de Dios este en nosotros y se vea en actos de bien y misericordia por los demás. 

Cántico: Enviado soy de Dios

//Enviado soy de Dios, mi mano lista esta 

para construir con él un mundo fraternal.//

Los ángeles no son enviados a cambiar 

un mundo de dolor, por un mundo de paz. 

Me ha tocado a mi hacerlo realidad, 

ayúdame Señor a hacer tu voluntad.