Altar familiar – 1 de mayo

Rvdo. Abner Meléndez Feliciano

Pastor ICDC Amelia

Región 3

Dios es suficiente

Leamos la Palabra de Dios en el Salmo 63.1-8

“Dios, Dios mío eres tú;  De madrugada te buscaré;   Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, En tierra seca y árida donde no hay aguas, Para ver tu poder y tu gloria, Así como te he mirado en el santuario. Porque mejor es tu misericordia que la vida; Mis labios te alabarán. Así te bendeciré en mi vida;
En tu nombre alzaré mis manos. 

Como de meollo y de grosura será saciada mi alma,
Y con labios de júbilo te alabará mi boca, Cuando me acuerde de ti en mi lecho,
Cuando medite en ti en las vigilias de la noche. Porque has sido mi socorro,
Y así en la sombra de tus alas me regocijaré. Está mi alma apegada a ti;
Tu diestra me ha sostenido”. 

Entonemos el Cántico: Temprano yo te buscaré

Temprano yo te buscaré
De madrugada yo me acercaré a Ti
Mi alma te anhela y tiene sed
Para ver tu gloria y tu poder.

Mi socorro has sido Tú
Y en la sombra de tus alas
Yo me gozaré
Mi alma está apegada a Ti
Porque tu diestra me ha sostenido
Oh, tu diestra me ha sostenido.

Oración  de Gratitud por la presencia del Señor

Lectura del Salmo 62.1-2, 5-8, 11-12

“En Dios solamente está acallada mi alma;   De él viene mi salvación. El solamente es mi roca y mi salvación; Es mi refugio, no resbalaré mucho. Alma mía, en Dios solamente reposa, Porque de él es mi esperanza. El solamente es mi roca y mi salvación. Es mi refugio, no resbalaré. 

En Dios está mi salvación y mi gloria; En Dios está mi roca fuerte, y mi refugio. Esperad en él en todo tiempo, oh pueblos; Derramad delante de él vuestro corazón; Dios es nuestro refugio. Una vez habló Dios; Dos veces he oído esto: Que de Dios es el poder, 12 Y tuya, oh Señor, es la misericordia; Porque tú pagas a cada uno conforme a su obra”. 

Entonemos el Cántico: En Dios solamente está acallada mi alma

//En Dios solamente está acallad mi alma

De Él viene mi salvación.//

Alma mía, en Dios reposa solamente

En Él confía porque de Él es mi esperanza.

Alma mía, Él solamente es mi roca

Y mi salvación, derramo ante Él 

Mi corazón.

Alma mía en Dios reposa solamente

En Él confía porque de Él es mi esperanza.

Alma mía, Él solamente es mi roca

Y mi salvación, derramo ante Él 

Mi corazón.

//Derramo ante el mi corazón.//

Reflexión: Dios es suficiente

El Salmo 63 ha sido descrito como el “alma de los salmos”. Este salmo afirma la seguridad que proviene de Dios e inspira a la relación íntima con El Señor. El objetivo principal del mismo es la necesidad de buscar al Señor y mantenerse al amparo de su amor y misericordia en medio de alguna situación compleja y angustiante de la vida. Interesantemente el salmo se mueve de la nostalgia por alguna pérdida o crisis personal del autor, a la esperanza de recuperación y deleite de la presencia y favor de Dios. Una imagen que se destaca en el salmo es la del desierto, indicándonos la intensidad, gravedad y lo sofocante de la crisis que vivía el escritor. Desde esa realidad el salmista hace unas contundentes expresiones que  reflejan  anhelo de Dios, fe y  esperanza en su providencia. 

Definitivamente este es un escenario con el cual podemos identificarnos en diversos momentos de nuestro peregrinaje. Te invito a considerar brevemente, lo que a mi entender, son  unas verdades que fortalecen nuestra convicción de que Dios es suficiente para las transiciones, cambios, crisis, retos y oportunidades de la vida. Y podamos ver las noches oscuras del alma como espacios de crecimiento y madurez para una fe más robusta.

Por cuanto Dios es suficiente

  1. Búscale con fervor – Salmo 63.1
  2. Recuerda Su fidelidad – Salmo 63.2
  3. Alábale por su misericordia – Salmo 63.3-7
  4. Aférrate a Él con esperanza – Salmo 63.8

Hay seguridad al estar cerca de Dios y buscarle cada mañana. Enfrentemos las más agrias adversidades de la vida y los desiertos inesperados con la palabra grata de este salmo que sirve de bálsamo para el corazón quebrantado. Digamos con profunda convicción: DIOS ES SUFICIENTE.

Motivos de Oración:

  • Que podamos discernir el plan de Dios a través de cada desierto inesperado.
  • Para que seamos instrumento de bendición para otros, la mano solidaria que acompaña al que esté quebrantado.
  • Nuestra pasión por Dios nos conduzca al servicio con fervor.

Entonemos el Cántico: Bendice alma mía a Jehová

Bendice alma mía a Jehová

No te olvides de sus beneficios

Acuérdate  de donde te sacó, 

Te sacó, te sacó.

No te olvides que Él te salvó

No te olvides Él que te sanó

Y puso tus pies sobre peña

Y una nueva canción Él te dio.